La estética no es sólo cuestión de mujeres, ha aumentado un 30% la demanda en el sector masculino respecto a 2015
Cada vez son más los hombres que acuden a nuestra consulta simplemente con el objetivo de verse mejor o sacar partido a sus encantos. Otras veces, buscan prevenir, frenar o tratar los signos del envejecimiento a nivel de la piel y del cabello, para envejecer de esta forma con la mejor de las caras.
Los tratamientos de medicina estética se han popularizado en multitud de centros de estética que han aflorado desde que empezó a menguar la crisis económica y desde que se ha democratizado su uso. Debido en gran parte a su fácil acceso económico, en algunos casos, y a las informaciones de diversos medios de comunicación que muestran, en ocasiones, más las consecuencias del mal uso o abuso en personajes mediáticos que sus beneficios.
DE LOS 20 A LOS 30 AÑOS, los tratamientos más solicitados están enfocados a realzar o potenciar la belleza de cada uno, sacando el máximo partido a los rasgos propios.
Los peelings químicos y los tratamientos con luz pulsada son los más solicitados para tratar el acné, las imperfecciones de la piel, preparar la piel antes o después de la exposición solar y exfoliar las células muertas.
Aunque sin lugar a dudas, el aumento de labios con ácido hialurónico, al igual que en mujeres, es el tratamiento estrella en nuestras consultas a estas edades.
A PARTIR DE LOS 30-35 AñOS, los temidos signos de envejecimiento pueden empezar a manifestarse por lo que la prevención, sin duda alguna, es la mejor solución. Tanto para conseguir fácilmente resultados naturales como para requerir el uso de poca dosis de producto y con ello alcanzar efectos realmente positivos.
Las infiltraciones de cócteles de vitaminas y ácido hialurónico o incluso el plasma rico en plaquetas -PRP, obtenido de la propia sangre- es el recurso más utilizado a nivel de las capas más superficiales de la piel de cara, cuello y escote para aportar más luminosidad a las pieles apagadas.
El cabello es uno de los principales caballos de batalla en muchos hombres, sobre todo, cuando empieza a desaparecer por un tema genético o por estrés. Para combatir los primeros signos de caída y dar más fortaleza al pelo así como densificarlo aconsejamos las infiltraciones de PRP junto con vitaminas específicas.
A MEDIDA qUE SE ACERCAN LOS 40 AñOS, los músculos de la expresión facial empiezan a dejar huella en la piel y se marcan las líneas de expresión. Para suavizarlas o difuminarlas tenemos el mejor aliado desde hace 20 años, el también tratamiento top en cualquier consulta, temido por algunos y vanagloriado por otros, el bótox. En manos expertas, usándolo estratégicamente, en su justa dosis y en su justo momento, conseguimos caras descansadas y joviales, dinámicas y naturales, y no caras de porcelana o de cera.
Del mismo modo, en esta época de la vida, la grasa de los pómulos empieza a deshacerse y cambiar de sitio, algo que empeora con las oscilaciones de peso. La piel empieza a perder elasticidad por lo que el ácido hialurónico en todas sus versiones, en cuanto a densidad y composición, empieza a ser el mejor aliado para mantener las ojeras a ralla, los pómulos en su sitio y mantener hidratada la piel de cara y cuello.
A PARTIR DE LOS 40 AñOS, la flacidez facial puede ser el principal motivo de preocupación al igual que en las mujeres. Para frenarla y dar más elasticidad a la piel, la radiofrecuencia médica con INDIBA DEEP CARE y los hilos tensores suponen los mejores tratamientos médico estéticos.
Por último, a cualquier edad, el control del peso no deja de ser una preocupación para muchos. Una suplementación con productos dietéticos ricos en proteínas y bajos en hidratos de carbono, de nuestra línea OJ Diet, puede ser el mejor recurso para mantener a raya el peso; y, en otros casos, una dieta bajo control médico puede ser necesaria para poder tratar un sobrepeso o eliminar unos kilos de más y ponerse a tono justo antes del verano.
Por el Dr. Oscar Junco
