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20 Mitos sobre cirugía y medicina estética

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Lo último en tratamientos estéticos… Verdades y mentiras. Modas pasajeras o tratamientos efectivos y duraderos. Leyendas Urbanas. Los cirujanos y médicos estéticos más prestigiosos lo saben y nos lo cuentan:

1.   La abdominoplastia impide volver a quedarse embarazada. FALSO. La paciente puede volver a quedarse embarazada sin problemas. Lo que sí puede ocurrir es que con el nuevo embarazo, debido a la distensión que volverá a sufrir la piel y la musculatura, se pierdan los resultados obtenidos tras la cirugía.  Por este motivo se recomienda operarse cuando la paciente tome la decisión de no tener más hijos.

2.    Cuando se pasan los efectos del Botox el rostro queda peor que antes. FALSO. La finalidad del Botox es debilitar el movimiento de los músculos donde se infiltra, una vez pasado su efecto el músculo vuelve a tener a la misma dinámica.

3.    El Botox deforma los labios. FALSO. El Botox no es una sustancia que proporciona volumen, tan solo debilita el músculo. En los labios, solo atenúa las arrugas peribucales. Si queremos aumentar el volumen deberíamos recurrir a una sustancia de relleno reabsorbible como es el ácido hialurónico. Las deformidades en los labios que tanta repercusión mediática tienen se deben a un exceso de relleno, o bien, a implantes permanentes como pueden ser siliconas o metacrilatos.

4.    Si te pones Botox pierdes la expresión facial. FALSO. La cuestión está en saber aplicarlo en las zonas y cantidades adecuadas, y mantener el periodo de tiempo prudencial entre cada sesión, para obtener un resultado natural. Por ello siempre se debe acudir a un buen profesional 

5.    La cirugía estética es inaccesible. FALSO. Actualmente podemos encontrar en el mercado un gran abanico de precios para un mismo tratamiento. Debemos vigilar las promociones ya que en ocasiones la calidad y cantidad del tratamiento puede estar comprometida; del mismo modo, un precio desorbitado no es garantía de un mejor tratamiento.

6.    Cuando eres un niño no puedes hacerte una otoplastia. FALSO. A partir de los 6 años de edad, momento en el que el pabellón auricular está desarrollado por completo, ya se puede realizar esta intervención. De este modo podemos evitar posibles traumas psicológicos durante la infancia.

7.    La blefaroplastia o cirugía de los párpados puede provocar problemas de visión.  FALSO. El objetivo de esta cirugía es retirar el exceso de piel o grasa de los párpados y no debe interferir en la visión. Sin embargo, una técnica inapropiada y poco minuciosa si podría.

8.    Después de la liposucción se vuelve a engordar. FALSO. Lo esencial en una liposucción es su correcta indicación, hay que tener en cuenta que no es un método milagroso de adelgazamiento. Su finalidad es redefinir la silueta corporal, eliminando los cúmulos de grasa localizados en abdomen, flancos, cartucheras y cara interna de muslos entre otros. Para mantener los resultados obtenidos lo primordial es seguir unos hábitos de vida saludables.

9.    La celulitis desaparece con la liposucción. FALSO. La celulitis es un problema de la piel y la liposucción es una técnica para eliminar la grasa que pueda existir debajo de la piel, tenga o no celulitis. Sí que es cierto que en los casos en que exista grasa y celulitis en la misma zona, puede mejorar el aspecto de la piel.

10.  La grasa acumulada se puede quitar con una dieta milagro. FALSO. Con una dieta podemos reducir el grosor de nuestro tejido graso pero hay que tener en cuenta que existen cúmulos de grasa de origen genético que no se eliminarán con ningún tipo de dieta, en estos casos será necesario recurrir a otros tratamientos.

11.  Las cicatrices de la cirugía pueden desaparecer. FALSO. La cirugía siempre deja cicatriz aunque se intenta disimular de la mejor manera. La visibilidad de la cicatriz dependerá de la capacidad del paciente para cicatrizar y los tratamientos que siga después de la operación.

12.  Si te sometes aun aumento de pecho no puedes amamantar a tu bebé. FALSO. La mayoría de las pacientes podrán amamantar sin inconvenientes, a no ser que se haya modificado la forma o distribución de la glándula mamaria en la cirugía; como ocurre en gran parte de las mamas tuberosas o cuando se acompaña de una mastopexia (elevación de senos).

13.  Un pecho operado nunca se verá natural. FALSO. Un pecho operado no tiene porqué ser evidente. Hoy en día disponemos de una gran variedad de implantes en el mercado. La tendencia actual es obtener unos resultados naturales en armonía con el resto del cuerpo. Simplemente hay que tener en cuenta las características y expectativas de la paciente.

14. Tras una cirugía de aumento de pecho se pierde la sensibilidad de la zona. FALSO. La sensibilidad tras un aumento de pecho no tiene porque perderse ya que no se compromete ningún nervio vital. Puede existir algún tipo de alteración las primeras semanas debido a la inflamación.

15. Los pechos pueden volver a crecer después de una reducción mamaria. VERDAD. Si se produjera un aumento del tejido glandular y adiposo por una causa hormonal como el embarazo o por el aumento de peso, las mamas podrían volver a aumentar de volumen.

16.  Los implantes se pueden romper viajando en avión. FALSO. Los implantes mamarios están diseñados para soportar grandes variaciones de presión atmosférica.

17. Todas las prótesis mamarias hay que cambiarlas cada 10 años. FALSO. Una prótesis se debe cambiar cuando esté deteriorada. Obviamente existen diferentes calidades de implantes. Con una prótesis de gama alta tenemos la tranquilidad de que durante los primeros 10 años el riesgo de desgaste es mínimo, a partir de entonces se recomienda un control periódico para comprobar su estado.

18. La cirugía estética de la nariz siempre provoca problema de respiración. FALSO. Cualquier cirugía no está exenta de riesgos y complicaciones. Para obtener unos resultados óptimos y mantener la función respiratoria íntegra es necesario elegir la técnica adecuada. No obstante, es cierto que los primeros meses después de la intervención puede existir cierta dificultad respiratoria debido a la inflamación.

19.  Las narices operadas siempre quedan pequeñas y respingadas. FALSO. La rinoplastia permite modificar el tamaño y forma de la nariz. Durante una época se estiló las narices de reducido tamaño con punta respingona. En la actualidad según la nariz y la fisonomía de cada paciente nos decantaremos por una técnica u otra para conseguir un rostro más armónico.

20.   Es preferible iniciar los tratamientos antiaging cuando las arrugas son evidentes. FALSO. Siempre se ha dicho que es mejor prevenir que curar. Es más sencillo tratar una arruga incipiente que una más marcada, ya que con menos cantidad de producto obtendremos unos resultados más naturales.

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